Ya estamos experimentando los graves impactos del cambio climático, y la pérdida de biodiversidad en materia de aves, personas y nuestro planeta. Sin embargo, en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático de este año (COP29), celebrada en Bakú, Azerbaiyán, los líderes del mundo no lograron tomar medidas significativas para abordar la magnitud y la urgencia de la crisis.
El resultado, aunque decepcionante, no fue una sorpresa para la comunidad climática mundial. ԼƵ participó en COP anteriores sobre clima y biodiversidad, incluida la conferencia de biodiversidad COP16 celebrada este año en Colombia, y junto con nuestros socios mundiales reconocemos que la próxima conferencia climática de la ONU en Brasil debe ser un punto de inflexión para las personas y la vida silvestre. No podemos perder tiempo.
La ciencia climática de ԼƵ predice que dos tercios de las especies de aves de América del Norte están en peligro de extinción debido al cambio climático y la pérdida de biodiversidad, y en un informe reciente de la ONU se menciona que, a escala mundial, la mitad de las especies migratorias están disminuyendo y más del 20% está en peligro de extinción.
No podemos perder otra oportunidad en la COP30. Hay mucho en juego.
Las aves son indicadores de la salud de nuestro planeta. Su disminución señala mayores pérdidas futuras para otras especies silvestres, los ecosistemas y las personas. Las aves también son clave para las soluciones: al salvar a las aves y sus hábitats, podemos proteger a las personas y al planeta.
Debemos trabajar urgentemente para revertir el cambio climático y la pérdida de biodiversidad, y, en última instancia, “cambiar el curso de las aves”, por el bien de las aves y el nuestro.
En la COP29, junto con la coalición , ԼƵ que reconociera y financiara soluciones climáticas basadas en la naturaleza. Sin embargo, los resultados de la reunión no fueron suficientes. El mensaje que llevaremos a la COP30, basado en los últimos datos científicos y en los principales aprendizajes de nuestro trabajo en todo el hemisferio occidental, tiene tres partes:
1. Los modelos innovadores para el financiamiento hemisférico del clima y la conservación son fundamentales para el progreso mundial.
A través de una planificación de conservación rigurosa y basada en la ciencia, y con los socios financieros adecuados, podemos proteger estratégicamente a las aves, reducir las emisiones de carbono, mitigar el cambio climático y obtener beneficios económicos significativos para las comunidades, todo al mismo tiempo.
La una asociación entre ԼƵ, y el (CAF), es un buen ejemplo de este modelo que combina ciencia de vanguardia con mecanismos financieros ágiles para gestionar ecosistemas clave para las aves y las personas de manera sustentable.
En la Conferencia de la ONU sobre la Biodiversidad (COP16) en Cali, Colombia, realizada en octubre de este año, anunciamos junto con nuestros socios que AFI pasará de la planificación a la implementación para gestionar de manera sustentable más de 30 paisajes terrestres y marinos en el hemisferio occidental hasta el 2050, y administrar entre 3000 y 5000 millones de dólares.
El programa Conserva Aves es otra asociación para crear áreas protegidas subnacionales que fomenta la biodiversidad y la sustentabilidad económica de las comunidades, a la vez que beneficia a las aves. Junto con nuestras organizaciones socias Birds Canada, American Bird Conservancy, BirdLife International y RedLAC, Conserva Aves ayudará a establecer más de 80 áreas protegidas nuevas que abarcan dos millones de hectáreas en todo el hemisferio.
2. Necesitamos una transición rápida y responsable hacia una economía ecológica con la infraestructura necesaria que sea amigable con las aves y las personas.
Podemos desarrollar infraestructura nueva de energías renovables sin comprometer los objetivos de biodiversidad. Los científicos de ԼƵ están realizando investigaciones para comprender cómo podemos construir infraestructura crítica de energías renovables, como energía eólica, solar y líneas de transmisión, que minimice el impacto en las aves, otras especies silvestres y las comunidades.
También estamos invitando a la mesa a socios poco probables - como desarrolladores de energía, funcionarios gubernamentales, organizaciones ambientales y comunidades- para que comprendan la ciencia y así hacer avanzar los proyectos de forma rápida y responsable. Compartimos las últimas investigaciones sobre energía eólica en la Semana del Clima de Nueva York, en septiembre pasado. A principios del 2025 se publicará un informe completo sobre las oportunidades para el desarrollo eólico marino respetuoso con las aves.
3. Debemos seguir valorando las contribuciones de los pueblos indígenas y las comunidades locales en la conservación de la biodiversidad y las soluciones climáticas.
Si bien la COP29 hizo poco por escuchar y proteger a los pueblos indígenas y las comunidades locales, uno de los aspectos más destacados de la conferencia sobre la biodiversidad (COP16) fue la adopción de tareas específicas para garantizar que los derechos, las contribuciones y el conocimiento tradicional de los pueblos indígenas y las comunidades locales estén integrados en la agenda mundial de la biodiversidad. Debemos llevar el impulso de la conferencia sobre la biodiversidad a la COP30.
ԼƵ está trabajando para valorar y apoyar la conservación liderada por indígenas. Un ejemplo son los programas de Áreas Indígenas Protegidas y Conservadas y de Guardianes Indígenas en Canadá, mediante los cuales los pueblos indígenas son responsables de los planes más ambiciosos para preservar y cuidar el bosque boreal. Sabemos que para proteger a las aves y los lugares que necesitan, debemos trabajar con quienes han cuidado las tierras durante generaciones.
A medida que el mundo se prepara para la COP30, ԼƵ seguirá defendiendo estos principios junto con nuestros socios mundiales para encontrar soluciones, basadas en la ciencia, a las crisis climáticas y de biodiversidad. No hay tiempo que perder.